Pero más allá de la señal de la cruz, esta coreografía nos recuerda hacia dónde tiene que orientarse nuestra vida:
- Hacia arriba: allí está Dios, en lo alto, viéndonos, apoyándonos, sosteniéndonos...
- Hacia abajo: allí están los pobres, los humillados, los últimos...
- Hacia un lado y hacia otro: allí nos encontramos con nuestros hermanos de comunidad, personas como nosotros que nos acompañan y ayudan a caminar...
Desde ahora, mangante, ya sabes dónde están las cosas importantes de la vida: "arriba, abajo, a un lado y a otro".