Hace un año Benedicto XVI sorprendió al mundo entero al
anunciar que renunciaba como Papa y que se abría un período nuevo para elegir a
su sucesor. Fueron momentos de incertidumbre, de búsqueda de rumbo, de
esperanza y preocupación, porque si un Papa renuncia es porque algo está
pasando.
A los pocos meses recibíamos con alegría la elección de
Francisco como Pastor máximo de la Iglesia. Y desde entonces el Obispo de Roma
no ha parado de pescar y sorprender al mundo. El que un Papa pesque y extienda
el Evangelio en la tierra no es ninguna novedad, pero que lo haga de la forma
como lo está haciendo Francisco sí que es nuevo. ¿Por qué Francisco está
convenciendo y ganándose la simpatía de todos? ¿cuál es el estilo de pescar de
Francisco? He aquí algunos detalles:
- Francisco
se muestra alegre, sonriente. Tiene un rostro amable y cercano.
- Francisco
no anda con ropajes extraños, con vestimentas de otra época.
- Francisco
anuncia y vive el Evangelio con sencillez, con un lenguaje directo y fácil de
entender para todos.
- Francisco
no huye de los periodistas y sus preguntas malintencionadas. Trata todos los
temas con respeto.
- Francisco
está abierto al diálogo con todos, sobre cualquier tema.
- Francisco
critica y exige primero a los de dentro (sacerdotes, religiosos, religiosas…)
para que seamos consecuentes con el Evangelio. A los pastores de la Iglesia les
invita a oler a oveja.
Por esto y por otros motivos podemos decir que Francisco no es solo un buen Pastor sino un buen Pescador.